Cuándo y cómo escribir un proverbio
Cómo escribir un proverbio
En rigor, es imposible “escribir” un refranero, ya que por definición los refranes surgen de la cultura general y no tienen un solo autor. Sin embargo, puede incorporar proverbios en su escritura bajo algunas circunstancias, que discutiremos en la siguiente sección.
Hay una excepción a esta regla general en el caso de la ciencia ficción y la fantasía, cuando los autores a menudo deben crear culturas ficticias. Una forma de mostrar los valores y símbolos de una cultura ficticia es crear algunos proverbios para ella. Hay dos pasos para inventar un proverbio ficticio para una cultura inventada.
- Determinar los valores de la cultura. Para un pueblo de elfos del bosque, esto podría ser virtudes como la paciencia, el sigilo y la armonía con la naturaleza. Para una especie alienígena agresiva, por otro lado, los proverbios podrían ser más sobre la sed de sangre y la lealtad al clan.
- Encuentre una metáfora apropiada. Para darle a su “proverbio” la mayor textura posible, decida qué tipo de imágenes figurativas es más probable que use su cultura inventada. Para volver a nuestros ejemplos anteriores, los elfos podrían usar metáforas de árboles o agua (p. ej., «Los brotes más lentos se convierten en los árboles más fuertes»), mientras que los alienígenas agresivos podrían recurrir a metáforas más brutales (p. ej., «la sangre es más dulce que la miel»).
Cuándo usar un proverbio
También puedes usar proverbios en ensayos formales, pero es mejor hacerlo solo si tienes la intención de desafiarlos o complicarlos de alguna manera. Debido a que los proverbios son tan generales y extraídos de una cultura más amplia, no encajan bien con dos de los objetivos principales de la escritura formal: especificidad y originalidad. Pero por la misma razón, desafiar un proverbio es una buena manera de darle fuerza a su argumento y mostrar que hay una pregunta genuina que debe ser respondida por su trabajo.
Por ejemplo, un artículo de filosofía podría comenzar de esta manera:
La sabiduría general sugiere que ‘la belleza está en el ojo del espectador‘, lo que significa que todos los juicios estéticos son subjetivos. Pero experimentos recientes indican que puede haber estándares objetivos y universales de belleza artística compartidos por todas las culturas humanas. ¿Significa esto que la belleza no es un juicio subjetivo?
Esta apertura describiría claramente las preguntas que el artículo debe responder y mostraría que el autor tiene algo interesante que decir, algo que los lectores quizás no esperen o se den cuenta.
Nunca use un proverbio como evidencia en un argumento: esto es equivalente a la «apelación a la creencia generalizada», una falacia lógica bien conocida.